En Cancún, específicamente en la región 99 y cerca de la escuela primaria “Carmen Serdán”, se desplegó un importante contingente policial tras recibir un reporte alarmante: la presencia de una narcomanta.
El descubrimiento, comunicado a través del número de emergencia 911 por preocupados ciudadanos, ha generado una reacción de alerta entre las autoridades.
Lo encontrado pone de manifiesto posibles lazos entre los encargados de la seguridad penitenciaria y grupos delictivos en la zona.
Esta narcomanta es solo una pieza más en un rompecabezas inquietante que sugiere la complicidad de funcionarios estatales en actividades ilegales.
Este incidente subraya la preocupación por una supuesta colaboración entre figuras del gobierno y el crimen organizado. Este panorama representa un grave riesgo para la seguridad de los ciudadanos, tanto dentro como fuera del centro penitenciario de Benito Juárez.
El mensaje en la manta constituye un llamado a las autoridades Federales y Estatales para tomar medidas. La ciudadanía está cansada de la violencia desencadenada por extorsiones, secuestros y pagos ilegales que tienen su origen en la prisión de Cancún. Los (zetas), protegidos en el Módulo “I” y bajo el mando de HUACHO (conocido como (KARMA, SARGENTOS y/o SOLDADOS), amenazan a los comerciantes que no pagan la cuota exigida.
Dentro de la prisión, se hostiga e intimida a los recién llegados para extorsionarles grandes sumas a cambio de una supuesta “comodidad y seguridad”. En caso de negarse, HUACHO moviliza a un grupo conocido por “GALLO”, “ALEMAN”, “PINOCHO”, “TEPO”, “FRIJOL”, “NOBLE”,”CHILANGO”,”MONO”, “MUERTO”, “MAMITO”, Y “SOLO”. Este último se encarga de agredir por orden de HUACHO, presumiendo respaldo del Cmdte.*FAUSTINO, JONATAN, ANGÉL y el ex subdirector MARIO DIAZ CMDTE:FAUSTINO. Estos individuos presionan para colaborar debido a la ausencia de protección gubernamental y al temor por sus vidas y las de sus familias. Se insta al Gobierno a detener esta red criminal. (SIC).
