Francia ha observado un constante aumento en la presencia de plagas de chinches en el país durante aproximadamente dos décadas, según informes de medios locales.
Recientemente, se ha planteado la posibilidad de que Rusia esté desempeñando un papel en la creciente alarma relacionada con la plaga de chinches que afecta a París y ha sido declarada una «emergencia nacional» por las autoridades parisinas, según ha comunicado RMC este lunes.
Según las fuentes citadas por el medio, que se basan en los servicios de inteligencia franceses, los ciudadanos franceses están cada vez más preocupados por la invasión de chinches en sus hogares, el transporte público, cines, hospitales y escuelas. Se ha afirmado que los rusos han contribuido a esta preocupación al inundar las redes sociales con información falsa sobre el tema.
RMC ha señalado la presencia de artículos falsos publicados en la prensa local que se han difundido en medios internacionales. Uno de estos artículos, publicado por el periódico La Montagne, afirma que las sanciones impuestas a Rusia son la causa de la invasión de chinches en Francia. Otro artículo, atribuido a Libération, sugiere que refugiados ucranianos están detrás de la epidemia de chinches en Francia.
Sin embargo, RMC enfatiza que «los rusos no son los responsables de originar esta psicosis» y que «no son los culpables de la presencia de chinches». De hecho, se ha observado un constante aumento en la presencia de estas plagas en el país durante las últimas dos décadas.
A principios de octubre, las autoridades francesas cerraron siete escuelas debido a la presencia de chinches. El ministro de Educación, Gabriel Attal, informó que se han detectado chinches en más de 15, e incluso 17, establecimientos, lo que ha llevado al cierre de siete de ellos.
El ministro de Salud y Prevención de Francia, Aurelien Rousseau, ha asegurado que la plaga de chinches no debe ser motivo de pánico. Mientras tanto, los legisladores están preparando un proyecto de ley que se presentará en diciembre para abordar este problema.
En septiembre pasado, el primer teniente de alcalde de París, Emmanuel Grégoire, describió la invasión de chinches como un problema endémico en todos los lugares públicos y la calificó como una verdadera «emergencia nacional». Advertía que «nadie es inmune» a esta situación.
